Una necesidad educativa específica de la persona con TGD es la falta de capacidad para procesar la información significativa de su entorno, lo cual hace que viva en un mundo imprevisible, confuso y amenazador. La estructuración favorece un ambiente predecible, donde el ambiente se sienta seguro.
Otra necesidad educativa específica de la persona con TGD es la alteración en las habilidades comunicativas y sociales, por lo que los entornos deben ser licitadores de comunicación, autonomía personal y desarrollo integral del sujeto.
Las personas con TGD presentan resistencia a los cambios, una adhesión inflexible a las rutinas o rituales. Esta necesidad educativa específica de la persona con TGD hace necesario, en un primer momento, facilitar una rutina estructurada en lugar, tiempo, cantidad y disposición de los materiales, para posteriormente programar, planificar e introducir los cambios paulatinamente.
Otra necesidad educativa específica de la persona con TGD es que pueden presentar una falta de armonía en el desarrollo cognitivo, presentando una mejor habilidad viso-espacial y de memoria mecánica más que verbal y significativa.
Dentro de los trastornos asociados, una necesidad educativa específica de la persona con TGD es que puede presentar retraso mental, haciendo necesario que cada tarea se descomponga y estructure en pasos más simples y claros.
Una necesidad educativa específica de la persona con TGD muy característica es que mantienen intereses restringidos anormales por su intensidad u objetivo que requieren control o reconducción.
La necesidad educativa específica de la persona con TGD consistente en “dificultades lingüísticas” se da especialmente en el desarrollo de las habilidades pragmáticas, que se facilitan en un entorno que provoque la comunicación funcional y espontánea.
Además, las personas con TGD tienen una ausencia de juego realista, espontáneo y variado o imitación social. Esta necesidad educativa específica de la persona con TGD limita la función que el juego cumple, especialmente en el desarrollo cognitivo, comunicativo y social de las personas.
En el Centro FICEN damos respuesta profesional a niños que padecen síntomas característicos de este trastorno. Además asesoramos y orientamos a la persona y a sus familiares.
Referencias: Déjame que te hable de los niños y niñas con autismo de tu escuela. Arantxa Martín. Beatriz Ruiz y Juana María Hernández. Teleno Ediciones S.L. Madrid.