El término mioclono se refiere a las sacudidas repentinas e involuntarias de un músculo o grupo de músculos. Describe un signo médico y generalmente no constituye el diagnóstico de una enfermedad. Los tirones o jalones mioclónicos generalmente resultan de contracciones musculares repentinas llamadas mioclonos positivos, o de un relajamiento muscular llamado mioclono negativo. Las sacudidas mioclónicas pueden ocurrir solas o en secuencia, con o sin algún patrón determinado. Pueden ocurrir infrecuentemente, o muchas veces por minuto. Los mioclonos ocasionalmente ocurren como respuesta a un evento externo o cuando una persona trata de realizar un movimiento. Las contracciones son incontrolables.

En su manera más sencilla, el mioclono consiste en una contracción seguida por un relajamiento del músculo. El hipo es un ejemplo de este tipo de mioclono. Otros ejemplos familiares de mioclonos son los sobresaltos nocturnos o mioclonías del sueño que algunas personas tienen cuando están quedándose dormidas. Estas formas sencillas de mioclonos ocurren en personas normales y saludables sin causar problema alguno. Cuando son más prevalecientes, los mioclonos consisten en contracciones persistentes en forma de sacudidas violentas en un grupo de músculos. En algunos casos, los mioclonos comienzan en una región del cuerpo y se esparcen a los músculos en otras áreas. Los casos más severos de mioclonos pueden distorsionar el movimiento y limitar severamente la capacidad de comer, hablar o caminar. Estos tipos de mioclonos indicarían un trastorno asociado en el cerebro o los nervios.

Las mioclonías resultan de muchas causas; como reacción a una infección, lesión en la cabeza o en la médula espinal, apoplejía, tumores cerebrales, fallo renal o hepático, enfermedad de almacenamiento de lípidos, envenenamiento químico o por drogas, u otros trastornos. Una privación prolongada de oxígeno al cerebro, llamada hipoxia, puede causar un mioclono posthipóxico o postanóxico. El mioclono puede ocurrir solo, pero frecuentemente es uno de los varios síntomas asociados con una gran variedad de trastornos del sistema nervioso. Por ejemplo, las sacudidas mioclónicas se pueden ocurrir en pacientes con esclerosis múltiple, la enfermedad de Parkinson, la enfermedad de Alzheimer, o la enfermedad de Creutzfeldt-Jacob. Las sacudidas mioclónicas ocurren comúnmente en personas con epilepsia, un trastorno en que la actividad eléctrica en el cerebro se altera, lo que conduce a convulsiones.

En el Centro Ficen damos respuesta profesional a todo problema como es en las mioclonías. Además asesoramos y orientamos a la persona con discapacidad y a sus familiares.