Los ejercicios de débito inspiratorio controlado, EDIC, son maniobras inspiratorias lentas y profundas ejecutadas en decúbito lateral, situando la región que hay que tratar en supralateral. Se realizan con la ayuda de los mismos ejercicios inspiratorios que los utilizados en espirometría incentivada, es decir, los que son capaces de objetivar un débito inspiratorio lento y el volumen inspirado. La posición de decúbito lateral, utilizada por los EDIC, aprovecha los efectos de expansión regional pasiva de los espacios aéreos periféricos, obtenida por la hiperinsuflación relativa del pulmón supralateral y aumento del diámetro transversal del tórax, obtenido por la inspiración profunda.
La ejecución de la maniobra de EDIC en supralateral difiere poco de un ejercicio de espirometría incentivada del que se distingue, sin embargo, en dos aspectos fundamentales: la elección precisa o selección de la región que hay que tratar y la duración de la apnea teleinspiratoria.
La selección de la región a tratar se obtiene por la adopción de una posición precisa. Dependiendo de la localización de la afección:
- Para el tratamiento de una afección posterobasal, el sujeto ha de estar en decúbito lateral, con el cuerpo ligeramente girado hacia delante y la pelvis perpendicular al plano de la camilla.
- Para el tratamiento de una afección anterobasal, el cuerpo ha de estar ligeramente girado hacia atrás y la pelvis perpendicular con relación al plano de apoyo.
El hecho de colocar la región a tratar en supralateral es una medida destinada a obtener un mayor diámetro torácico transversal al final de la inspiración. Este agrandamiento torácico tiende a acentuar las fuerzas gravitatorias sobre el parénquima pulmonar persiguiendo una presión pleural circundante lo más baja posible, lo que da lugar a un estado de insuflación óptimo y localizado.
Desde un punto de vista mecánico, la inspiración lenta y la apnea teleinspiratoria de EDIC tienen como objetivo igualar las constantes de tiempo de las unidades pulmonares periféricas, cuya compliancia y resistencia están alteradas. Estos trastornos son responsables de la desigualdad de distribución de la ventilación.
Los ejercicios de EDIC están indicados en presencia de ruidos respiratorios bronquiales, de ruidos respiratorios normales disminuidos y de crujidos de alta frecuencia en las afecciones pulmonares donde la acumulación de secreciones en los espacios aéreos periféricos es la dominante fisiopatológica. Estos ejercicios activos requieren la cooperación del paciente y se pueden aplicar a partir de los 3 ó 4 años.
Una indicación relativamente frecuente de los EDIC es la afección del lóbulo medio, particularmente frágil en el niño, y lugar de localización preferente de atelectasias y de neumopatías.
La falta de cooperación, el dolor debido a una afección pleural concomitante y la hiperreactividad bronquial son las principales limitaciones y contraindicaciones de los EDIC.
En el Centro Ficen utilizamos la técnica EDIC para dar respuesta profesional a toda patología respiratoria que se pueda beneficiar de su aplicación. Además asesoramos y orientamos a la persona con discapacidad y a sus familiares.